La semana anterior a la Feria de Santiago, días 16 a 20 de julio, se celebró en nuestro pueblo uno de los eventos más emotivos de cuantos han tenido lugar en los últimos tiempos. Tras meses de preparación, el lunes 16 de madrugada se inició la semana agrícola colona con motivo del 250 aniversario del municipio, la primera de cinco jornadas donde pudimos acercarnos a los orígenes de nuestra localidad de la mano de las duras faenas del campo que cada año se repetían hasta la llegada de la mecanización. Gracias a la Cooperativa y particularmente a su promotor, José Ángel Costa, los mayores lograron despojarse de varias décadas recordando batallas más o menos gloriosas, mientras que los más jóvenes se divertían escuchándolos y observando cómo desarrollaban sus habilidades agrícolas más o menos conservadas. La era se convirtió durante esos días en el punto de encuentro a nivel local, elevando las distintas tareas a la categoría de auténtico espectáculo con una afluencia masiva de público para presenciar tanto la construcción del chozo como segar, desbrozar, arnillar, aventar… Tras la conclusión de todas las labores programadas, el viernes a mediodía se ofreció un almuerzo en el mismo chozo, y ya por la noche se festejó la clausura con una velá organizada por la asociación de San Isidro Labrador en el campo de fútbol. Desde el Ayuntamiento sólo queda dar las gracias a la Cooperativa, a José Ángel, a todos los componentes de la cuadrilla -que se han esforzado sin límite para sacar adelante la cosecha-, a la asociación de San Isidro y a cuantas personas acudieron a contemplar las diversas actividades, que hicieron de la semana agrícola colona un éxito sin paliativos.